
Filosofía y principios
Convencido de la importancia emocional en el desarrollo humano.
Estoy firmemente convencido de que el ser humano es un complejo conjunto de emociones que fundamentan todas nuestras acciones en los ámbitos familiar, social, laboral y académico. Por lo tanto, es importante abordar este aspecto desde la academia. La educación institucional puede fortalecer o enseñar estas habilidades a través de ejercicios frecuentes.
El bienestar emocional como clave del éxito
Tengo la certeza de que para desempeñarse eficientemente en cualquier campo, las personas deben estar bien emocionalmente. Solo así podrán alcanzar su máximo potencial.
La familia: base fundamental
Creo profundamente que la familia es el pilar sobre el cual se construye una sociedad sólida. Es aquí donde se deben trabajar tanto las fortalezas como las debilidades.
Aprendizaje y autorregulación
No creo que existan estudiantes buenos o malos; simplemente hay alumnos a quienes no se les han enseñado estrategias adecuadas para desarrollar autorregulación, autonomía y motivación.
La profesión docente: un llamado constante a la innovación
Estoy seguro de que muchos docentes aún no comprenden plenamente el impacto vital que tiene nuestra profesión en el desarrollo social. Es imperativo seguir actualizando nuestras metodologías para alinearnos con las necesidades cambiantes de nuevas generaciones.
Forjando vocaciones docentes
Pienso que pocas personas nacen con una vocación innata por enseñar, pero lo fascinante es que esta vocación puede forjarse día a día mediante trabajo arduo, actitud positiva y amor por nuestra labor.
Motivación e infinitud del aprendizaje
Estoy convencido de que la motivación es trascendental para alcanzar metas, pero debe desarrollarse paralelamente con los conocimientos y experiencias adquiridas a lo largo del camino, pero sobre todo con la autodisciplina.
He llegado a comprender lo maravillosa que es la vida; pues cada día nos brinda nuevas oportunidades para aprender, amar, sonreír y sentir gratitud por todo lo recibido.
Finalmente, siento firmemente que no son los bienes materiales acumulados los determinantes del logro personal; sino más bien nuestro bienestar físico-emocional propio y de los seres que amamos.







Enseñanza en la era digital.
Tecnología de la Información y Comunicación (TIC)
En lo relacionado con la Tecnología de la Información y Comunicación (TIC), puedo garantizar que fomentan la motivación por el aprendizaje, generan la creatividad, mejoran la innovación, promueven la interacción y fortalecen la comunicación entre profesores, estudiantes y padres de familia. En ese sentido, el sistema educativo actual sugiere el uso de las TIC en el proceso enseñanza aprendizaje en todos los niveles educativos, pues estas nos brindan una variedad de herramientas que ayudan al docente a forjar un aprendizaje significativo.
Con base en esto, estoy convencido que los docentes debemos actualizar nuestras competencias y habilidades en el manejo de las mismas, ya que mediante su uso podemos motivar el aprendizaje, eliminar fronteras para acceder a la educación, fomentar la autonomía de los alumnos, atender a las necesidades del contexto educativo y sobre todo, aprovechar las destrezas y gusto por el manejo de las tecnologías del alumnado.
Frente a las TIC la UNESCO (2021) las mencionan como parte fundamental para “complementar, enriquecer y transformar la educación”, pues según esta organización afirman que mediante su implementación se facilita el acceso a la educación reduciendo las limitaciones para aprender, además, mencionan que sirven de apoyo a la praxis que ejerce el docente en el contexto, pues proporciona una variedad de recursos que le permiten garantizar la calidad en el proceso.
En ese sentido, si algo debemos aprender de esta pandemia es que las TIC nos han apoyado para alcanzar los resultados de aprendizaje en cierta medida, sobre todo en los lugares en donde existe acceso a internet, sin embargo, es necesario destacar que de la misma manera ha privado a varios estudiantes que no tienen acceso a la Web.
Ante esta situación, también es importante mencionar que no solamente la falta de Internet ha sido una limitación, sino también, las pocas habilidades que muchos docentes tienen, lo cual, ha influido en el desarrollo eficiente del proceso enseñanza-aprendizaje en el contexto de la emergencia sanitaria, ya que, antes de este suceso, solamente se aplicaba las TIC por afinidad, personalidad e innovación del docente.
De allí la imperiosa necesidad que, desde las políticas educativas gubernamentales se fomente el fortalecimiento en el manejo de las TIC a toda la comunidad educativa, acceso a Internet sobre todo a la población vulnerable, propuesta de nuevas modalidades híbridas de estudio, entre otros aspectos. Finalmente, considerar que si bien es cierto, la tecnología ha eliminado las barreras de acceso a la educación, su excesivo uso puede ser perjudicial para la sociedad en general, comenzado desde los más pequeños hasta la población adulta. Por lo tanto, al igual que se debería buscar la manera de fortalecer las TIC, es imprescindible educar su uso desde la Inteligencia Emocional, para evitar que en momentos posteriores, la solución se transforme en problema.